Este Agosto, el cielo nos regala un fenómeno mágico, una Luna Azul. Este término se refiere a la ocasión en que dos lunas llenas se presentan en un solo mes. Este evento celestial ocurre cada dos o tres años, cuando la primera luna llena aparece en los primeros días del mes y la segunda al final. Este próximo fin de semana, la primera de estas lunas se alzará en el cielo, creando un equilibrio cósmico entre Acuario y Leo.
Acuario, bajo la tutela de Urano y Saturno, Padre e Hijo en la mitología griega, nos invita a reflexionar sobre nuestros valores personales y comunitarios. Esta Luna nos presenta una transición que hemos estado contemplando durante meses, un cambio entre el Viejo Orden y el Futuro emergente. Este cambio amenaza con transformar nuestros valores más arraigados, lo que para muchos puede significar la muerte de sus creencias y sistemas de valores.
Este cambio se refleja en la política, la religión, y en nuestras historias personales. Nos encontramos en la encrucijada entre nuestros intereses personales y los de la comunidad en la que vivimos. Nos hace sentir que estamos en dos aceras diferentes, por un lado los que defienden el Viejo Orden y los que desean algo nuevo, o mejor dicho los que sintonizan con la necesidad de cambio de un Status-Quo que se desploma por su propio peso y su creciente irrelevancia.
Esta transición se ve potenciada por la T-cuadrada entre Plutón, en transición entre Capricornio y Acuario, y los Nodos Lunares. Este aspecto astrológico nos habla de la necesidad de encontrar nuevas formas de relacionarnos y de planificar y regular el Nuevo Orden que lucha por emerger, y la resistencia del Viejo Orden que pierde poder. Nos obliga a encontrar ese punto medio entre nuestros «aparentes» puntos de vista opuestos.
En el inconsciente de muchos, la inminencia de lo nuevo se percibe como un peligro, una amenaza al orden y lo conocido, lo que les lleva a luchar vehementemente por «mantener» lo que conocen y sienten que les da seguridad, aunque ello ya no funcione en sus vidas, ya que el terror ante lo desconocido es mucho mayor y amenazante.
Este proceso, aunque se expresa a nivel mundial, también se vive en nuestra vida cotidiana. Nos lleva a cuestionarnos si realmente estamos tomando consciencia de ese nuevo yo que está pidiendo emerger y el temor a darle expresión. Este es un proceso que ocurre en el planeta y a todos los que vivimos en él. Consciente o inconscientemente lo estamos viviendo.
Te invito a meditar sobre qué es lo que necesitas dejar atrás para continuar con tu evolución y bienestar. ¿Qué trabajo, qué estudios, qué relaciones necesitan una renovación absoluta o una transformación total para poder evolucionar y descubrir nuevas facetas de nuestro Ser? La voz interna que teme al cambio siempre encontrará excusas para detenernos en este proceso, pero la voz que reconoce la necesidad de cambio deberá «Confiar» en lo que vendrá, aunque signifique la pérdida de algunas cosas de mucho valor.
Para muchos, cuando ya comenzaban a sentir que finalmente habían llegado a cierta estabilidad, ahora viene otro sacudón y propuesta de cambio. Pero la máquina evolutiva no para y nunca podemos «quedarnos como estamos» por más cómoda que sea la situación. Muchos de nosotros tenemos herramientas para facilitarnos el proceso, esto, que será diferente para cada persona, puede ser compartido para que este pasaje sea más fácil para todos.
Acuario nos propone usar su facilidad para tomar distancia del problema en cuestión y mirar desapasionadamente las diferentes posibilidades. Si nos esforzamos, podremos encontrar ese espacio de encuentro, ese compromiso, entre los dos extremos en los que parecemos encontrarnos ahora. Este es un trabajo que debe ser ejecutado por todos, o por los menos por la mayoría que puede, que es más consciente.
Vivir en la inconsciencia y la «inocencia» es el peligro. Estamos siendo llamados a «participar», cada uno desde donde podemos, en ubicarnos en ese punto medio, para poder ver el punto de vista del «otro» y no mirar sólo desde nuestra perspectiva. Esto no es fácil, pero es lo que debemos hacer, si queremos evitar más guerra y más caos. El Viejo Orden debe abrirse al cambio y el Nuevo Orden debe formarse basado en las lecciones aprendidas del Viejo Orden.
Júpiter, en su exacto trígono a Marte, nos ayudará a dar un impulso bien pensado y realista, para que a ninguna de las partes, se les «infle el Ego» y se lancen a la lucha frente a frente, pensando que son los guardianes de «la Verdad». Urano, también en cuadratura a Venus, nos sugiere cambiar de táctica y encontrar nuevas formas de comunicación y acercamiento. Si insistimos en seguir funcionando «como siempre» en nuestras relaciones, no funcionará. Cuanto más empecinado el Viejo Orden se ponga, más oposición encontrará y viceversa.
Saturno, co-regente de esta luna en Acuario, opone a Mercurio, casi exactamente, por tanto, aunque los encuentros y reuniones para encontrar acuerdos parezcan frustrantes, es posible que traigan algún tipo de solución al dilema. El resultado de las elecciones en España, son un buen campo de expresión de ello.
Lilith y Kirón se encuentran también en trígono y cada uno sentiremos la potencia y frustración de tener que «ceder» y «comprometer», si sólo miramos y sentimos la situación desde el EGO.
Una buena meditación para la Luna Llena en Acuario de este próximo fin de semana, es centrarnos en nuestro Centro, y desde ese espacio alineado con nuestra alma y corazón, escuchar la voz más sabia de nuestra psique e invocar la Humildad, la Armonía, el Agradecimiento y el Amor, por todo lo que está vivo en este planeta, pues somos parte de todo ello y juntos será más fácil encontrar las respuestas adecuadas para una resolución beneficiosa para Todos.